Estoy acostado en mi cama con los ojos cerrados y los puños apretados, cubriéndome bajo mis sábanas. Llevo horas tratando de no moverme, porque sé que está ahí afuera acechándome...
Trato de contener en mi pecho cada respiración. Intento hacer el menor ruido posible, escuchando esa otra respiración a mi lado. Yo respiro, y él respira al mismo tiempo. No puedo verlo, pero lo escucho cerca de donde estoy. Siento su presencia.
Me doy cuenta que estoy tiritando de frío. Abro los ojos, y la poca luz que entra por mi ventana ilumina mi vaho. Busco con la mirada a mi alrededor, sin moverme. Quiero parecer dormido. No sé qué haré si sabe que estoy despierto.
Escucho algo que se arrastra en el piso de mi habitación. El silencio es rasgado con el estruendo de la madera que cruje. Siento como mi corazón se acelera cada vez más. El pánico comienza a apoderarse de mi cuerpo. Vuelvo a cerrar los ojos con todas mis fuerzas, mientras repito en mi cabeza "Es sólo tu imaginación"...
Vuelvo a abrir mis ojos por un instante esperando despertar de esta pesadilla, y ahí estaba frente a mi... Esa silueta obscura parada a los pies de mi cama, mirándome fijamente... Y en la pared escritas con sangre las palabras "Sé que estás despierto"...